Durante la semana del 8 al 12, y aprovechando la festividad de Marlofa y las fiestas del Pilar de Zaragoza, el claustro de profesores del Ramón y Cajal decidimos emprender dos días lectivos de aprendizajes y experiencias con una metodología más lúdica. A través de uno de nuestros famosos apadrinamientos entre alumnos, nos pusimos el cachirulo y diseñamos unos talleres que, gracias a la ayuda de las familias y a la Asociación de la Tercera Edad de la localidad, fueron todo un éxito de participación.
Clases de jota, aprendizaje y memorización de retahílas de cabezudos, fabricación de castañuelas caseras, aprender y conocer el origen de diversas palabras aragonesas que nombramos cada día sin saber su origen propio y único o practicar diversos juegos tradicionales aragoneses tan propios de nuestra cultura. ¡Qué fácil y divertido es aprender sin libro!
Clases de jota, aprendizaje y memorización de retahílas de cabezudos, fabricación de castañuelas caseras, aprender y conocer el origen de diversas palabras aragonesas que nombramos cada día sin saber su origen propio y único o practicar diversos juegos tradicionales aragoneses tan propios de nuestra cultura. ¡Qué fácil y divertido es aprender sin libro!
Pues todo esto y más hicimos el martes, como podemos ver en este vídeo resumen que se muestra a continuación.
El miércoles por la mañana continuaron los talleres. Esta vez los alumnos se fabricaron su propio traje de baturro. Pañuelico y faja los chicos. Pañuelico y falda las chicas. Y ¡cabezudos en el recreo!, portados orgullosamente por los concejales del ayuntamiento.
Ya por la tarde, con todos los padres del centro invitados a la celebración, exhibición de bailes aragoneses y una jota en la que participaron los 104 alumnos del cole.
Pero... pensad una comida típica aragonesa. Una que hacían nuestras abuelas y que, aún hoy día, en muchas casas se sigue realizando de forma natural y casera.
Venga otra pista. Se sirven acompañadas de uva y con un sofrito de choricico y sebo.
La definitiva. Su ingrediente principal es el pan... duro para más señas.
Claro que sí ¡LAS MIGAS! Elaboradas gracias a la Panadería El Jabato de Villarrapa que puso la materia prima y al cariño y esfuerzo de la Asociación de Tercera Edad Joyamar. El resultado, excelente, dejando un grato regusto en el paladar de niños, familias y profes.
Qué divertidas y cuánto aprendemos todos, unos de otros, en estas jornadas locas lúdico-pedagógicas y, es que, hay cosas que no salen en los libros.
Gracias al Ayuntamiento de La Joyosa, la Panaderia el Jabato de Villarrapa, la Asociación Joyamar, a todas las familias que participasteis y al claustro de profesores. FELICES FIESTAS.
Es una gozada para las familias compartir este tipo de jornadas con el cole. Muchas gracias, lo pasamos genial!!
ResponderEliminar